Elige tu propia aventura

Después de una feliz mañana en la playa, decides darte un último chapuzón para deshacerte de la arena, pero un golpe de mar te arrastra lejos de la orilla. Desde dentro, alcanzas a ver una montonera de avispas ocupando el camino que lleva hasta tu coche. Un poco más a la derecha comienza otro sendero que parece más seguro, pero para llegar a él, tendrías que atravesar un pequeño banco de medusas...
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Si eliges alcanzar la orilla y caminar entre las avispas, ve a la página 57.
Si eliges cruzar nadando entre las medusas, ve a la 92.
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"Ja! Yo sé bien cómo se las gastan las medusas. Me voy por las avispas, que luego se van y no te pican. A mí nunca me ha picado ninguna"
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[pág 57]
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"Nadas tranquilo hasta la orilla, recoges las cosas y caminas hasta tu coche aparcado a la sombrita. Casi todas las avispas son simpáticas, se apartan al pasar y no se cuelan dentro de tu coche abierto. Pero otras son unas agrias y te pican en el mismo dedo meñique con que diste la patada el otro dia a la esquina de la cama. Te duele un montón y se te hincha como una berenjena, pero aun puedes conducir. Te subes al coche pensando que a lo mejor con cerveza y unas tapas se te pasa y que la próxima vez, mejor ahorras en observaciones estúpidas. FIN"
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[pág 92]
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"Nadas un poco más a la derecha entre las medusas. Te pican todas las que pillas y te mueres. FIN"
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"Mnñnñpfff...."
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